Los cultivos de coca en Bolivia se incrementaron un 10% en 2024, según informe de la UNODC
Los cultivos de hoja de coca en Bolivia registraron un incremento del 10%, al pasar de 31.000 hectáreas (ha) en 2022 a 34.000 hectáreas en 2024, según un informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD).
Los datos se encuentran en el Informe de Monitoreo de Cultivos de Coca 2024 que fue presentado este lunes en las instalaciones de la Cancillería por la representante de la UNODC en Bolivia, Mónica Mendoza, y contó con la participación de autoridades de Gobierno.
De las 34.000 hectáreas totalizadas en el informe, la región de Los Yungas de La Paz cuantificó una superficie de cultivos de coca de 19.230 hectáreas, equivalente a un aumento del 4%, mientras que la región Norte de La Paz registró una superficie de 478 hectáreas, reportando una disminución del 2% respecto al año anterior.
Respecto a la región Trópico de Cochabamba registró una superficie de 14.275 hectáreas, equivalente a un incremento del 18%.
En materia de erradicación y racionalización de cultivos, el Gobierno de Bolivia informó la eliminación de 10.001 hectáreas, de las cuales UNODC validó el equivalente al 23% mediante apoyo de campo y análisis de información proporcionada por el Estado boliviano.
El monitoreo también registró una disminución de 583 hectáreas, registradas en 2023, a 515 hectáreas el año pasado, lo que representa una disminución del 12%.
En el Parque Nacional y Área Natural de Manejo Integrado Amboró la reducción fue del 55%, en el Parque Nacional y Área Natural de Manejo Integrado Madidi fue del 16%; en el Parque Nacional Carrasco fue del 14% mientras que en el Área Natural de Manejo Integrado Apolobamba llegó al 4%.
Sin embargo, en el Parque Nacional y Territorio Indígena Isiboro Sécure el impacto de los cultivos de coca aumentó un 39% el año pasado respecto a 2022, mientras que en el Parque Nacional y Área Natural de Manejo Integrado Cotapata aumentó un 12%.
Entre las recomendaciones de la ONUDD se encuentran actualizar los factores de rendimiento promedio del cultivo de coca, con el fin de establecer su potencial de producción y fortalecer políticas públicas encaminadas a garantizar que el cultivo y el comercio de coca se mantengan dentro de los límites necesarios para fines lícitos.
Otra sugerencia es considerar el desarrollo de estudios e investigaciones sobre el cultivo de la hoja de coca, su producción, comercialización y consumo, encaminados a actualizar la información sobre la demanda de consumo interno para fines legales; analizar la trazabilidad y la relación entre mercados lícitos e ilícitos. Estos insumos son esenciales para diseñar políticas integrales, efectivas y basadas en evidencia.
Además, la organización recomendó incrementar las medidas de control de los cultivos de coca, priorizando los Parques Nacionales y Áreas Protegidas. ///agc
Fuente: Erbol | Seguridad
